Guatemala: La elección de Magistrados al Tribunal Supremo Electoral – ¿basada en méritos o en intereses particulares?

Inmediatamente después de publicar este blog, hemos sido informados de que las elecciones a Magistrados del Tribunal Supremo Electoral tuvieron lugar de forma inesperada en la noche de ayer. David Gaytán, escritor de este texto, comentó: El Congreso otra vez quedó debiendo la transparencia y rendición de cuentas. Lo hizo al estilo de siempre, tras cuotas y negociaciones con reuniones privadas y oscuras. No transparentó el proceso de toma de decisiones. Volvemos a quedarnos con la idea de que el Legislativo solo responde a negociaciones políticas.

David Gaitán, Coordinador de Proyectos de Acción Ciudadana, en conferencia de prensa sobre acceso a la información.

Guatemala enfrenta una crisis institucional en materia electoral marcada por el financiamiento ilícito de campañas electorales, campañas anticipadas e incumplimiento de sanciones legales. Estos son algunos de los desafíos que deberá afrontar con capacidad y valentía el nuevo Tribunal Supremo Electoral, que el Congreso elegirá probablemente el 13 de Marzo. El Tribunal será además el encargado de organizar las elecciones generales en el año 2015.

El ordenamiento jurídico guatemalteco establece que los Magistrados del Tribunal Supremo Electoral serán elegidos por el Congreso de la República de una lista de cuarenta candidatos. Estas cuarenta personas son propuestas por una Comisión de Postulación integrada por profesionales del derecho ajenos a intereses particulares o políticos.

Sin embargo, la práctica ha demostrado que la labor de la Comisión se ve afectada por influencias de sectores con intereses opacos que buscan cooptar el Tribunal Supremo Electoral, para que continúe siendo una institución débil con escaso poder regulatorio y sancionatorio. En elecciones anteriores esta elección de los diputados ha estado basada en negociaciones políticas, al no existir procedimientos objetivos y transparentes que aseguren que los funcionarios han sido elegido en base a méritos de capacidad, idoneidad y honradez.

El riesgo de que esto se repita, llevó a las organizaciones de sociedad civil a incidir para transparentar el proceso a cargo de la Comisión de Postulación, logrando en el actual proceso que las sesiones sean abiertas al público, se conozca el voto de cada integrante, se publique la hoja de vida de los candidatos, las actas de sesiones y demás información en poder de la Comisión.

Más específicamente, Acción Ciudadana, capítulo de Transparency International, ha hecho un llamado al Congreso de la República pidiendo:

1. Que establezca un procedimiento para llevar a cabo el examen y evaluación de los aspirantes a Magistrados del Tribunal Supremo Electoral, de forma que la elección que haga sea en base a parámetros públicamente conocidos. Que actúe como cuerpo colegiado por tratarse de un tema de máxima relevancia nacional. En caso lo hicieran por organización política (bancada), que se hagan públicos los criterios que han sido considerados para escoger a los postulantes de su preferencia.
2. Que se lleve un record de todas las actuaciones que se realicen en el pleno, o cualquier otra instancia, dentro del proceso de nominación a fin que se rinda cuentas y se minimicen los riesgos de negociaciones oscuras.

A la fecha estos requerimientos no han sido tenidos en cuenta y cada día aumentan los riesgos de que la elección sea, al igual que en años pasados, discrecional y opaca, distribuyendo los puestos a discreción de las bancadas mayoritarias en el Congreso de la República, sin que rindan cuentas de la motivación de su selección. Esto pone en riesgo el fortalecimiento democrático del país.